Harav Yitzchak Ginsburgh

lunes, 18 de octubre de 2010

Se nos ordena cincuncidar

Se nos ordena a circuncidar nuestro corazón, nuestros oídos, y nuestros labios, remover de ellos la gruesa piel del egocentrismo.

We are commanded to circumcise our heart, our ears, and our lips, to remove from them the coarse foreskin of egocentricity.

No hay comentarios:

Publicar un comentario